El número de muertos por los devastadores terremotos llega este jueves a casi 19.400, de los que 16.170 se han contabilizado en Turquía y 3.192 en Siria. Además hay unos 70.000 heridos de distinta consideración.
En Turquía el número de heridos alcanza los 64.194, mientras que el recuento de edificios derruidos por los temblores se mantiene igual respecto a ayer, con 6.444.
El último balance de víctimas lo ofreció el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que también denunció saqueos en algunas zonas y prometió una dura respuesta.
«Lamentablemente hay saqueos de mercados en algunos lugares. El Estado reacciona a eso mediante el estado de emergencia», dijo el mandatario en una declaración pública en Gaziantep, una gran ciudad situada al este del epicentro del terremoto.
Según el mandatario, el estado de emergencia de tres meses entrará hoy en vigor tras recibir el visto bueno del Parlamento, donde su partido, el AKP, tiene mayoría.
«Vamos a intervenir contra los saqueos con estos poderes», aseguró Erdogan, quien arremetió además contra la oposición y los medios críticos con su gestión del desastre.
«El Estado de excepción dará al Estado la oportunidad de luchar contra quienes abusen del proceso (de rescate y reconstrucción)», advirtió Erdogan, que en mayo pretende revalidar su cargo en las elecciones presidenciales.
La oposición, liderada por el partido socialdemócrata CHP, pero también numerosos usuarios en redes sociales, critica la gestión de emergencia de las autoridades tras los seísmos.
En Siria, la cifra oficial de muertos asciende ya a 3.192 y la de heridos a 5.235, mientras las labores de rescate continúan en las cinco provincias del país más afectadas con pocas esperanzas de hallar supervivientes.
Los rescatistas alertaron de que las cifras podrían seguir subiendo, ya que muchas personas continúan atrapadas bajo los escombros en el cuarto día de operaciones de emergencia tras el sismo inicial registrado el lunes y al que han seguido múltiples réplicas.
EFE